Primera División A

Banco Nación sueña con volver a sus tiempos de gloria

Banco Nación sueña con volver a sus tiempos de gloria

A casi tres décadas de los tiempos con títulos de la mano de Hugo Porta, los bancarios viven un tiempo de renovación y búsqueda de nueva identidad. Instalados en los Olivares, para Banco el 2020 encierra nuevos desafío.


Un poco de historia 

El Club Atlético Banco Nación fue fundado en el año 1909 en Colegiales, pensado inicialmente para la recreación de los empleados del banco. Su sede principal pasó por los barrios de Villa Luro y Flores, hasta que en 1928 llegó al predio actual de la calle Zufriategui, en Vicente López. 

Entre otras disciplinas, ahí comenzó a jugar al rugby en la única cancha disponible. Por ese entonces militaba la Segunda División de la Unión Argentina de Rugby, hasta que en 1972 adquirió el predio de Benavídez, donde se estableció y permaneció por casi tres décadas (actualmente allí está el Club Pueyrredón). Su ascenso a Primera División se produjo en 1971 y allí permaneció hasta 1991, año en que perdió la categoría por un año. Volvió a Primera en 1993 hasta el 2010 que volvió a descender. Luego de jugar en el Grupo I en 2015 y 2016, con la reestructuración de la URBA quedó en la “A” desde 2017.

 

La década dorada 

Pero fue en la década de los ‘80 donde brilló y tuvo sus mejores logros.  El equipo capitaneado por el gran Hugo Porta, estaba compuesto además por varios jugadores que también fueron seleccionados: Fabián Turnes, Fabio Gómez, Pablo Dinisio, Pablo Franchi y Rodolfo Etchegoyen, entre otros.  Era un equipo que practicaba un rugby total, vistoso y de gran dinámica, similar al que podemos ver hoy en el Super Rugby. Fue un gran animador de los torneos de la Unión y sus partidos eran de gran nivel técnico, memorables hasta el día de hoy.  

Ganó los seven de la UAR de los años ’74, ’84, ‘86 y ’87, y fue campeón de Primera División en los años 1986 y 1989. Participó en el “Torneo de Campeones” en Francia y la prensa tituló “Rugby Champagne” a su juego.  

En 1989 venció al seleccionado de Canadá por 21 a 9, pero, sin dudas, el logro más resonante fue el inolvidable triunfo sobre el seleccionado de Inglaterra por 29 a 21, el 14 de julio de 1990 en el estadio de Vélez Sarsfield. Esa histórica fecha se instauró en el club para festejar el día del rugby y rememorarlo cada año por esa épica victoria. Después de la dolorosa derrota y debido a la vergüenza sufrida, el seleccionado inglés decidió no enfrentar nunca más a equipos que no fueran representativos nacionales.

En el 2006, producto de esos años gloriosos, Banco fue elegido como “Mejor Equipo de Club, de todos los tiempos”, en una terna que compartió con los equipos de Pucará (1944/1952) y el SIC (1977/1988).

Debido a los malos manejos de quienes condujeron los destinos de la institución, el rugby se quedó sin el predio de Benavidez que lo viera dos veces campeón y donde tantas camadas de jugadores desplegaran su juego. En 2010 llegó al actual predio denominado “Leopoldo Julián Gutiérrez” de los Olivares, en Grand Bourg, donde sueña con volver a tener sus tiempos de gloria.

 

La actualidad 

Para el equipo que hoy preside Hugo Porta en la Primera “A” del rugby porteño, el último certamen no fue el mejor. Con 11 victorias, un empate y 14 derrotas, sólo en la fecha 24 y luego de derrotar a San Carlos por 32 a 15, lograron la tranquilidad necesaria para escapar de la zona de repechaje. La victoria en la última fecha sobre Lomas Athletic por 52 a 21 y con punto bonus, los dejó un poco más arriba en la tabla final. 

En charla con Diego Mastrocola, el actual head coach, nos contó cuál es la realidad del equipo en el comienzo de un año tan particular.  

 

- Diego, ¿cuándo iniciaron la pretemporada y qué trabajos estaban haciendo?

-Arrancamos en la última semana de enero. La encaramos con trabajos físicos muy duros y alternándolos con las destrezas individuales por puesto, que era nuestro objetivo principal. 

- ¿Cuál fue el balance de los amistosos?

- Jugamos frente a Manuel Belgrano, San Cirano y Hurling. El balance fue muy positivo porque nos permitió probar a muchos chicos que subieron este año y pudimos ver algunos jugadores en diferentes puestos para poder encarar lo que se venía este año. 

- ¿Cómo se manejan ahora? ¿Aprovechan las herramientas que ofrece la Unión o crearon sus propias alternativas?

- Estamos haciendo un trabajo muy grande en el club para poder estar lo más conectados con los jugadores. Hacemos entrenamientos cuatro veces por semana de forma online y esta semana le sumamos algunos trabajos técnicos, que van a ser monitoreados por los entrenadores, lógicamente dentro de las posibilidades que cuentan los chicos en sus casas. El club está haciendo un aporte muy grande, con charlas con kinesiólogos, nutricionistas, trabajos físicos para juveniles e infantiles, y análisis de video.

- ¿Hacen seguimiento de los jugadores?

- Totalmente. En el plantel superior armamos diferentes grupos para poder estar cerca de los chicos en un momento que no es bueno para nadie. 

- En 2018 jugaron el repechaje contra Los Matreros y se pudieron salvar. El año pasado hasta último momento estuvieron muy cerca de repetir. ¿Qué hay que cambiar para estar más arriba y no pasar por esa situación?

- Creo que tenemos que confiar más en nosotros mismos. Tenemos un plantel de jugadores con muchísimas virtudes técnicas y mucho volumen de juego. Sólo tenemos que sostenerlo partido a partido. 

- ¿Qué equipos van a estar arriba y cuál podría ser la sorpresa?

- Seguramente La Plata y Atlético del Rosario que vienen del Top 12 van a dar pelea arriba. Yo pondría como sorpresa a Banco, pero entonces no sería una sorpresa. 

- ¿Cómo está el plantel?

- Es un año de transición, se retiraron varios chicos que tuvieron que poner como prioridad el trabajo o el estudio. En cuanto a las lesiones, la única larga es la de Manuel Alfaro, que tuvo que operarse del hombro y estaría volviendo para septiembre. 

- ¿Qué perspectivas tienen para este 2020?

- El objetivo principal es continuar mejorando nuestro juego y la idea es poder pelear lo más arriba posible. 

- ¿Cómo ves al club en general y cómo está con la suspensión de actividades?

- Al club lo veo muy bien, se está trabajando mucho desde el lado institucional. Hay una sinergia muy buena y estamos todos mancomunados para poder pasar este período de la mejor manera posible, intentando poder seguir en sintonía y cerca de los chicos. 

- Tenés un apellido muy conocido en el club y asociado con la segunda línea. Contanos un poco acerca de eso.

- (Risas) Sí! Mi papá, más conocido como 108, fue un entrenador legendario del club por muchísimos años. Mis tíos, Cacho y Horacio, fueron jugadores de la Primera y campeones en el 86. Mi hermano mayor, Juan Pablo, también jugó. Y hoy, las estrellas principales son mi hijo Santino, que juega en la gran M6 del club y ya tiene su camiseta con el mejor número del rugby: el 5! Mi hija Martina es la fanática número uno y sigue al club a todos lados desde que nació.

 

El staff del 2020 

Primera División: PEPE EPPENSTEIN (Backs) y DIEGO ALMIRON (Forwards).

Intermedia: HERNÁN LEEDS (Forwards) y JUAN ZUCOTTI (Backs).

Pre Intermedia A: RUBÉN BELLI (Forwards) y MATÍAS GONZALEZ BRAU (Backs).  

Pre Intermedia B: NICOLÁS AXENFELD y LUCHO LENTINI.

Preparadores físicos: WALTER OCCHIUZZI y CLAUDIO GUZMÁN.

Médicos: MARTÍN LERNER / MARIANO GARCÍA BISTOLFI y PABLO MARTïNEZ PORRAS.

Kinesiólogos: FERNANDO CRESPO y EMILIO DEL CAMPO.

Mánager: HÉCTOR BOGA.




Fotógrafo: Fede Lemos (@torcua_photo) y Alejandra Krickerberg - Rugby Champagne.

Fuente: Federico Lemos y Carlos Silva - Rugby Champagne.

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