Su círculo íntimo, estuvo presente en el Estadio de Tokio y como tantas veces acompañó al gran capitán, esta tarde en un momento por demás especial para el hombre récord de los Pumas. Su papá Hugo, su mamá Marcela y su señora Virginia junto a su beba Helenita, estuvieron desde la platea alentándolo y emocionándose hasta las lágrimas, cuando el hooker pisó el césped e ingresó por Julián Montoya para quedar en la historia grande de Los Pumas.
En diálogo exclusivo con Rugby Champagne, cada uno de los Creevy expresó sus sensaciones en este momento tan especial para la familia.
Su mamá, Marcela: “Parece que fue ayer cuando lo llevaba a su querido Club San Luis a jugar con sus amigos al rugby. Era chiquito, le encantaba tirarse en los charcos y siempre era el primero en embarrarse. Ahí fue creciendo y conociendo los valores del deporte. Por sobre todas las cosas: LA AMISTAD. Parece que fue ayer cuando fue convocado por la URBA para representar a su provincia. Lo acompañamos por todo el país. Parece que fue ayer que fue seleccionado para Los Pumitas, jugando varios mundiales. Parece que fue ayer que debutó en Los Pumas contra Japón. Y hoy, a 14 años de aquel partido, me encuentro en Japón festejando sus 88 partidos vistiendo la camiseta que con tanto orgullo lleva, representando a su país. Y como si fuera poco convirtiéndose en una leyenda del rugby argentino, ya que es el jugador argentino con más partidos jugados en la historia del rugby de nuestro país. Que puede sentir una madre ante semejante hecho: orgullo, emoción y la satisfacción de saber que su hijo, además de ser considerado muchas veces como uno de los mejores hookers del mundo, de ser un líder natural y de poner toda su garra ante las adversidades que le tocaron muchas veces pasar, es una excelente persona, querido y reconocido por todos.
¡Vamos Agus! ¡Vamos por muchas caps más, que tu familia que te adora estará siempre a tu lado! ¡Felicitaciones hijo, te merecés lo mejor!”.
Hugo Creevy, su papá: “Sinceramente es un momento muy especial para mí y toda la familia por lo que significa y por todo lo que Agustín ha tenido que hacer para lograr este récord. Solo él y su grupo más íntimo lo sabe. Desde siempre ha sido muy resiliente y ha encontrado el lado positivo cuando las cosas no le salían bien o cuando le tocó estar lesionado. Pero con su sacrificio, su humildad y con su entrega de siempre, salió adelante y hoy pudo cumplir este sueño que nos llena de orgullo y honor. Para él nada es más importante que la camiseta de Los Pumas y conseguir este logro lo hace doblemente gratificante por la significación de ser lo que a partir hoy es. No solo el jugador que más ha vestido la camiseta, sino también el que más ha capitaneado a su selección nacional. En lo personal, solo puedo decir que no entro en mi orgullo y que para mí fue, es y será el mejor del mundo, no solo como jugador sino, lo más importante, como persona. Hoy comparto su alegría y me hace muy feliz. Y ojalá pueda disfrutarlo mucho más dentro de la cancha, con la camiseta que sé que lo hace feliz y más le gusta”.
Su esposa, Virginia: “Ochenta y ocho partidos, otro récord, el número es excepcional y emociona, pero no logra capturar todo lo que implicó llegar a este momento. Fueron catorce años de un gran esfuerzo y un camino muy sinuoso, con grandes decepciones y extraordinarias satisfacciones. Una carrera que pasó por muchísimos momentos y en la que nada fue fácil. Un debut en una posición y la consagración en otra, con la asunción de varios riesgos con costos directos en pos de poder seguir vistiendo la camiseta de Los Pumas, camiseta por la que dejaste absolutamente todo…la que alguna vez me confesaste que determinaba todas tus decisiones, tanto profesionales como personales. Hoy festejamos otro logro juntos, convertirte en el jugador que más veces vistió la camiseta de Los Pumas. Te lo mereces porque siempre pusiste al equipo por encima de todo, porque siempre te preocupas por todos tus compañeros, porque sos una excelente persona y por todo el esfuerzo que hiciste para llegar adonde llegaste. Helena tiene mucha suerte, le tocó un gran padre, del que va a estar siempre muy orgullosa. Hoy festejamos aquí en Tokio y ojalá que este número siga creciendo. Conociéndote, no tengo duda de que así será”.
Fuente: Hernando De Cillia y Jorge Ciccodicola (enviados especiales a Japón).